El intendente de Merlo junto a sus pares de Hurlingham e Ituzaingó, se reunieron esta mañana con el fiscal federal de Morón Dr Nieva Woodgate, para encontrar una solución al tema de las amenazas en las escuelas de los distritos.
En los últimos dos meses se registraron un gran número de amenazas de bomba por día en diferentes escuelas del Conurbano bonaerense, un fenómeno que conmovió principalmente a Melro, Quilmes y Tres de Febrero.
Por este motivo, Gustavo Menédez solicitó un encuentro con el Fiscal Woodgate, donde se resolvió la designación de un fiscal que unifique todas las causas de amenazas y se solicitaron las herramientas tecnológicas para la investigación de las mismas.
Las comunicaciones telefónicas, en su mayoría, comparten una modalidad: se realizan ante el 911 y no al establecimiento en particular. Tras el aviso, se activa el protocolo de evacuación, que genera un engorroso proceso del que participan agentes de Defensa Civil, Bomberos Voluntarios, el SAME, Policía Local y Bonaerense, Tránsito y la Brigada Antiexplosivos.
Las advertencias al principio generan miedo, pero al hacerse cotidianas provocan el hartazgo de alumnos, docentes y padres. Como parte del protocolo hasta se cierran algunas calles, contribuyendo al caos vehicular y afectando a terceros.