El martes era el último día de reuniones que posibilitaban avances entre los dos sectores, pero no tuvieron resultados exitosos, ya que ninguno cedió antes las exigencias que pretendían.
Anoche se agotaron las negociaciones entre las partes donde están, por un lado los intendentes encabezados por el merlense Gustavo Menéndez, y por el otro, el actual titular del partido Fernando Espinoza. Ambos buscaban puntos de acuerdo para evitar el desgaste de una interna en tiempos que no la ameritan y consensuar una lista de unidad.
Si bien se dieron avances en los últimos encuentros, exigencias mutuas empantanaron esa posibilidad. A cambio de bajarse de la presidencia, los intendentes le ofrecieron a Espinoza la chance de encabezar la lista de congresales y la importante Secretaría General para Verónica Magario, su principal delfín y actual intendenta matancera, además de dos puestos en la rama femenina y otros dos en juventud.
Espinoza pretendía la mitad de los puestos en esas ramas y lugares también en la gremial, que para los jefes comunales está destinada a la elección del sindicalismo. Pero lo que generó mayor cortocircuito es que el actual titular del partido reclamó una alternancia en la presidencia por un año, lo que fue descartado completamente por los intendentes.
Ahora la Junta Electoral deberá resolver la aprobación de las listas con fecha límite el viernes. Mientras tanto, las negociación parecen agotadas.