Ayer sábado por la noche se vivieron horas de bronca y desconcierto abordo de una formación del tren Sarmiento, que salía de la estación Merlo hacia Once, cuando al cerrarse las puertas, desde el andén arrojaron un petardo encendido hacia el interior de la formación.
Según informaron pasajeros que viajaban en el vagón, el petardo explotó cerca de los pies de dos chicos que viajaban con sus padres sentados en los primeros asientos cerca de la puerta, los cuales se asustaron mucho y se pusieron a llorar desconsoladamente mientras su padre los contenía.
Según las informaciones, la familia descendió de la formación en la estación San Antonio de Padua en dónde fueron asistidos por personal ferroviario y de Gendarmería que trataron de calmar a los chicos por el susto que sufrieron y corroborar si habían sufrido algún tipo de daño a causa de la explosión.
«El llanto desgarrador de los pequeños nos hizo llorar también» comentó un pasajero que viajaba en la formación y fue testigo del hecho.