Será entregada por la Ministra de Seguridad Patricia Bullrich, cincuenta y dos años después, la bandera que la Gendarmería nacional se llevó consigo tras aquel tiroteo entre las dos fuerzas nacionales que tuvo lugar el 6 de noviembre de 1965.
El incidente de Laguna del Desierto fue el desenlace de una serie de episodios previos que conformaron un escenario de alta tensión, y se produjo en un contexto de fronteras muy indefinidas.
La antigua bandera chilena se encuentra desde aquel episodio en el museo del Edificio Centinela, de la Gendarmería Nacional. El año pasado, Bullrich y las fuerzas vecinas comenzaron un diálogo sobre la bandera, que será restituida a Santiago.
En Argentina afirman que fue el teniente Hernán Merino Correa quien les salió al cruce a los gendarmes y disparó primero, provocando la respuesta argentina. En Chile llaman al episodio “el asesinato de Merino Correa”.
Tras un acto de guerra, la Gendarmería aflojó la bandera chilena izada en el puesto y alzó el pabellón nacional que flamea desde entonces en dicha zona de Laguna del Desierto y se la llevó consigo a Buenos Aires.